Dirigente peronista acusado de amenazas y pedir fotos íntimas a una empleada

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El referente peronista piquense, Marcos Balor, fue sometido a una audiencia de formalización en Tribunales, luego que una mujer lo denunciara por haber sido amenazada para sacarse fotos de sus senos, caso contrario perdería el trabajo que tenía en el local partidario que dirige el mismo Balor.

La audiencia de formalización tuvo lugar ayer miércoles por la mañana en Tribunales, a puertas cerradas por tratarse de un hecho que involucra hechos de instancia privada, donde Balor asistió con un abogado particular como defensor, mientras que participaron también el fiscal Luciano Rebechi y el juez de Control, Diego Ambrogetti.

El hecho ocurrió a fines de febrero del año en curso, aunque recién este miércoles llegó a instancia de formalización. La denunciante renunció a su trabajo en el local partidario de calle 32 y 31 de la línea Renovación y Militancia Peronista, dirigida por Marcos Balor, quien decidió abrirse del PJ previo a las últimas elecciones y armar el Partido Popular Pampeano, que llevó al ex ministro Ojuez como candidato a gobernador, y al mismo Balor como primer candidato a diputado provincial.

El referente peronista piquense fue formalizado por “amenazas coactivas” y se retiró de Tribunales en libertad, aunque el juez actuante –a pedido de la Fiscalía- le impuso una restricción de acercamiento y contacto con la mujer que lo denunció.

La mujer denunció a Balor porque el ex candidato supuestamente la obligó a sacarse fotos de sus senos, bajo la amenaza de perder el trabajo que realizaba en el local partidario, publicó El Diario.

Las fotos habrían sido tomadas con el celular de Marcos Balor y supuestamente llegaron aparecer en los estados de whatsapp del mismo referente político local. En la denuncia también habría referencias de comentario de índole sexual que el mismo Balor habría manifestado verbalmente a la denunciante el día que supuestamente ocurrieron los hechos, el 26 de febrero del corriente año.

En su defensa, Balor negó públicamente los hechos que se le achacan y dijo lamentar lo ocurrido porque consideraba como “buena empleada” a la mujer que lo acusa, aunque luego no dejó claro para quién trabajaba, sí que realizaba tareas en el local partidario de calles 32 y 31.

El referente de Renovación y Militancia Peronista dijo haberse enterado de las fotos porque un amigo lo llamó para preguntar “de qué se trataban las fotos de su estado de whatsapp”, algo que Balor dijo desconocer. También aseguró que el mismo día la mujer le había pedido prestado el teléfono para comunicarse con su marido.